
Lo que más me ha llamado la atención del reportaje es que era uno de esos pueblos que se conocen como de "España cañí", o que parece estar anclado en los tiempos de nuestros abuelos, cuando todavía se estilaba sacar a las muchachas a bailar y lo máximo que podías hacer con tu pareja era darte un casto beso en la frente o ir de la mano. Un orgulloso organizador treinteañero y soltero se rodeaba de cincuentones que siguen viviendo en la época de la edad media y que dicen lindezas del tipo "mañana primero haré una revisión visual", "quiero una mujer que sea buena cocinera, doncella y cariñosa en la cama" y "aunq yo no marque un gol, mañana gana el equipo"...
Mi ego de mujer independiente se ha visto alterado y dolido. No sólo pq situaciones como esa responden a la perfección con los tópicos que hay sobre España (como que vamos con la peineta y el vestido de lunares por la calle), sino además porque me indigna que en pleno 2007 la gente diga estupideces del tipo de "doncella y cariñosa en la cama"... seamos sinceros, lo que quería ese hombre era que la susodicha sea una fiera, lo q pasa q hubiera quedado un poco de viejo verde diciendo esas cosas por la tele, aunq no se si es peor eso o parecer un hombre de atapuerca.
Señores, los tiempos cambian. Ayer leía en internet otro artículo que hablaba del intercambio de parejas. Sí, las caravanas han quedado desfasadas, ahora se estila ir a bares de intercambio de pareja (o "swing", q si tiene nombre en inglés parece que da más caché). El problema ahí está en que das por supuesto que tienes pareja y claro, a lo mejor lo primero es ir a una de esas caravanas para encontrarla...
Lo peor de todo no es que me llame la atención y me de morbo lo del intercambio (q dado mi estado hormonal actual no es de extrañar, si confundo un colgante con unas bolas chinas), sino que lo primero que he pensado al ver la noticia de la caravana por la tele ha sido que a ver si veía a algún chico mono para irme mañana a Ávila a probar suerte...